Son las 5 de la mañana, menos mal que es Sábado y podré dormir mejor esta próxima noche, asi me consuelo.
Pero lo cierto es que me encuentro eufórica, con deseos sorprendentes de cantar y bailar , mis músculos no se resisten, ya no están agarrotados y mi mente quinceañera rechaza el reflejo certero de ese rostro ajeno a mi , que muestra a toda costa el amargado espejo de esta sobria habitación, de esta fría habitación,...que no es la mía.
Pero qué sabrá el de mi? Qué sabe el de mis avatares ? Qué sabrá de mis miedos y mis dudas?
Nada. No sabe nada.
Y entonces espero impaciente a que amanezca, para poder refugiarme en mi rincón confiable y secreto donde descargo mis emociones , cotidianidad y aburrimiento.
Ahora casi prefiero aguardar hasta que pase la tempestad y deje mejor tiempo ...ya fuí catalogada una vez de apasionada y no resultó gratificante. No, no lo fue.
Ya sé, ya sé que te he abandonado por siglos, Rincón de mis encuentros más íntimos, mi eterno confidente , mi leal compañero. Pero hoy recurro a tí para liberar esta maldita sensación de tiempo perdido. Se que me comprendes.
Espero me perdones como también espero de tí ese perdón mi querido Don Henley.
Y es que soy como quien ha disfrutado un intenso romance de una noche sin conocer el nombre del amado. Lo que a todos nos parece un viejo chiste , pero convertido en triste realidad.
Es por ello que te escribo desde mis catorce años , desde mis quince años . Cuando bailaba con tu voz imaginándome un rostro, unos fuertes brazos y un cálido aliento. Bastaba con tan poco.
Cuando aún te esperaba pensando que llegarías justo en el momento del clímax de la fiesta.
Para entonces y al borde del desespero , aceptabamos ya impacientes al primer valiente en cruzar la barrera femenina destilando feromonas. Consciente que estarías ocupado en asuntos menos triviales e inalcanzables para los simples mortales.
Por suerte con el tiempo me cansé de tu indiferencia y fui creciendo más en espíritu que en tamaño, pero al final crecí ,que no es poco.
Algo guiada por la línea de la vida, entre fatales desencuentros y dulces
tropezones ; algunos aciertos y dolorosas despedidas. Cada vez más distantes los dos.
Tú mirando al Norte ; viviendo al limite. Yo haciendo cuanto estaba a mi alcance .
Lo cierto es que pasaron los años y en un video de plastico te conocí allá por los noventa y nueve. Un poco tarde no?
Y estabas ahí, mírate!!!, con tus cuarenta y tantos and look at you!!! Tan seguro y no se yo porque aún te amaba y si de veras merecías mi constancia de tantos años sin sacrificio alguno de ambas partes.
Y llegaron los reproches de como te perdiste tantos veranos? Y donde estuve yo tantos inviernos ?
Fue un paralelismo lleno de perpendiculares? Definitivamente ...creo que sí.
Y ahora respóndeme Don Henley, porque hasta hoy no conocía tu nombre y hoy lo puedo gritar, de hecho quiero gritarlo , pero aún me cuesta.
Y cuando caímos en este abismo que nos devoró décadas y aportó pecas ,canas, arrugas y esta jodida experiencia sin sabiduría...la misma que avisa que atrás quedó perdida la inocencia.
Así que me cubro de valor y lleno mi copa de blanco vino y te invito a que sigas acompañando mi soledad , pero no me vuelvas a abandonar.
A cambio solo te pido;
Perdóname por no asistir a tus conciertos. De hecho a ninguno.
Perdóname por no haber reconocido tus ojos en otros ojos.
Perdóname por haberme perdido tu sonrisa en otra sonrisa.
Perdóname por no saber más , perdóname de mi ignorancia por la música.
Y perdóname sobre todo por no conocer tu nombre.
Después del perdón , que me queda?
Me queda conformarme con escucharte y sentirte, con hacer realidad una vez más la máquina del tiempo y subirme a ella.
Y entonces dormirme con tu música y soñar y soñar y volver a soñar hasta que podamos encontrarnos quizás en una de estas noches.
Que bien escribes mujer!! Me pones los pelos de punta. A mi me encanta Eagles. Mi banda favorita.
ResponderEliminarSaludos de un Cubano que vive en Santiago de Chile.
Veo k regresas por todo lo alto. Exitos
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